- Un quiebre institucional viene sucediendo en el sector turismo.
A la lista encabezada por el Comité Consultivo Regional de Turismo y la Cámara Hotelera de Puno, entre otras, se suma APAVIT PUNO con motivo de sus elecciones internas para la renovación de su cuadro directivo.
En efecto, como es de dominio público, el ente que agrupa a las agencias de viajes y turismo de Puno durante muchos lustros se ha mantenido desconectado de su entorno ocasionando una ausencia en la toma de decisiones de la burocracia. Acaso el cenit de ésta crisis institucional se viene registrando hoy con un evidente vacío de liderazgo para resolver conflictos y conciliar proyectos. Tal vez como tabla de salvación la directiva vigente de la entonces Asociación Regional de Agencias de Viajes y Turismo de Puno, ARAVITP (creada el 31 de julio del año 1985) , decidió anexarla a APAVIT a partir del año 2016 al ente nacional que congrega desde hace 77 años a la mayoría de agencias de viajes nacionales, con éxito notable y activa participación en la actividad turística nacional, pese a cuestionamientos por cierto centralismo y falta de reacción ante problemas nacionales del sector; sin embargo la anexión no solucionó la falta de liderazgo en la actividad regional ni logró remontar la crisis interna.
Raquel Laura Asillo (foto) es la principal protagonista de éste drama institucional en su capítulo más reciente; contadora de profesión y radicada en la ciudad de Arequipa por razones de estudio desde antes de su elección como presidenta en el año 2020, por su justificada ausencia en Puno delegó sus funciones a sus directivos, sin embargo la casi nula participación en la problemática regional hizo desistir a los pocos socios, de mantener su vínculo gremial, reduciéndose actualmente a la cifra nada representativa de apenas 12 agencias de viajes.
LABERINTO TURÍSTICO
Algunos ex asociados de la otrora ARAVITP manifestan que tal vez la falta de experiencia en el sector y asuntos gremiales haya hecho cometer a la ocasional dirigente, éstos yerros que no han hecho más que entrampar más su situación, como haber convocado entre gallos y medianoche a elecciones, sin el conocimiento previo de la totalidad de sus socios ni directivos y obviando asimismo reglas tan básicas como la publicación de un cronograma anticipado con su respectivo reglamento, detallando fechas de tachas, requisitos para postulación ó el padrón de socios habilitados. La situación se agrava, como manifiesta un ex socio de ARAVITP, al ostentar Laura 3 posiciones a la vez, sino ilegales, nada éticas como: Presidenta en ejercicio de la Junta Directiva, Presidenta del Comité Electoral y al mismo tiempo postulante a cargo directivo como «Tesorera» de una nueva lista.
La fresa de la torta fué la convocatoria por tercera vez a elecciones el pasado viernes 27 de diciembre, sin haber saneado las observaciones descritas, con un grueso error adicional, al fijar como fecha «Lunes 30 de diciembre: recepción de observaciones fundamentadas», léase bien: no antes sino después de las elecciones. Finalmente en un nuevo intento por encontrar la salida al laberinto turísico, se fijó como convocatoria por 4ta. vez el próximo 6 de enero del año nuevo como fecha de elecciones en forma virtual.
MUCHO CAMINO POR RECORRER
Un antiguo guía de turismo puneño nos manifiesta que la nueva Junta Directiva electa en ésta oportunidad (ó en una 5ta. Convocatoria, si aún no se aclara el actual intríngulis procedimental) «tiene mucho camino por recorrer, por lo pronto su principal tarea será la recuperación de su credibilidad al interior del sector y fuera de él, su apertura a nuevos asociados (…) y abandonar la timidez, desidia y abstención tan criticadas ante situaciones de coyuntura». El turismo puneño no goza precisamente de una primavera, al contrario, la reconstrucción de su imagen desgastada va a requerir mucho trabajo de arquitectura organizacional.
Hola 0scar. El contenido de tu artículo es una versión más del quehacer institucional del sector conducido por amateurs. Te he señalado en el grupo de chat que lo que sigue es la reconstrucción de la representación empresarial del turismo puneño.