Cual balsa en medio del movido lago Titicaca, el ente rector de la actividad turística regional de Puno (DIRCETUR), se bamboleaba hacia un inminente encallamiento. Y es que desde hace año y medio su titular Marco Ojeda Chalco se desconectó en absoluto de la fuerza productiva del sector, al parecer no entendió que quienes generan ingresos y dinamizan la economía regional son los empresarios en pequeña, mediana y mayor medida diversificados en hoteles, restaurantes, transporte turístico lacustre y terrestre, artesanía y guías de turismo de la ciudad y zonas rurales, y que los turistas no llegan a Puno para visitar el despacho del Director Regional. Para su titular, cuya permanencia en el mullido sillón de la calle Ayacucho está en cuenta regresiva, la solución era “pasear” a la agremiación y justificar su inacción ante el Gobernador Regional.
El pasado lunes, la tolerancia rebasó sus límites en el empresariado que salió a las calles, acaso asemejándose a las marchas y luchas bulliciosas que son parte del inventario diario de la ciudad, las que espantan a propios y extraños, ésta vez el bullicio de más de 250 personas para exigir ser escuchados, cambiar de rumbo la vetusta embarcación y cual pasajeros del Titanic, pedir auxilio y rescate, tuvo una reacción favorable de la Gobernación.
SABER PEDIR, CÓMO PEDIR.
La espontaneidad de los organizadores de la marcha es plausible y demuestra que contrariamente a quienes piensan que el turismo altiplánico no tiene solución, más bien sirvió para replantear objetivos, uno de ellos es el cambio de una de las piezas fundamentales en el gigantesco rompecabezas; sin embargo, allí no queda la solución. Los marchantes deben asimilar lo que siempre se ha criticado por todos los medios y momentos: la formalización y consolidación de la Cámara Regional de Turismo de Puno que convoque, reconcilie, trace objetivos institucionales a largo plazo. También cuenta el hecho de subordinar intereses personales a intereses generales, acaso una de las características de nuestro fascinante y a la vez complicado sector sea que éste “no sabe qué pedir, a quién pedir ni cómo pedir” y por supuesto que gruesos sectores de la zona rural desconocen que no es atribución del Gobernador el cambio de Constitución, la liberación del Ex Presidente Castillo ó el encarcelamiento de la actual presidenta. Más bien sí es su facultad unir, conciliar y convocar a todos los puneños sin distingos de color de piel ó político y que por tomar posiciones ultristas, la región Puno se ha ganado el estigma de ser la más conflictiva y violenta habiendo logrado catapultarse vergonzosamente al 4to. y 14vo. lugar en las preferencias del turista nacional y el receptivo.
Hoy todos deseamos que la nueva embarcación del sector turismo llegue a buen puerto.